Algunos inversores prefieren tener su dinero invertido en una cuenta bancaria, mientras que otros prefieren invertir en acciones y bonos. Si busca una forma de ahorrar para comprar un coche o una casa nuevos, un fondo de inversión puede ser lo que necesita.
Los fondos de inversión facilitan la inversión de su dinero en una sola empresa, en lugar de tener que abrir cuentas en varios bancos o empresas. También facilitan la gestión de sus inversiones, ya que todas están bajo un mismo techo.
¿En qué consiste un fondo de inversión?
Un fondo de inversión es un fondo común de dinero que los inversores utilizan para comprar valores. Los valores suelen ser acciones, bonos o equivalentes de efectivo. Los inversores compran participaciones en el fondo, y el gestor del fondo decide cómo invertir el dinero para maximizar el rendimiento y minimizar el riesgo.
Los fondos de inversión pueden ser abiertos o cerrados. Los fondos abiertos permiten a los inversores adquirir nuevas participaciones en cualquier momento, mientras que los fondos cerrados sólo emiten participaciones en el momento de su creación y no emiten nuevas participaciones después de ese momento.
Beneficios
Con un fondo de inversión, puede invertir en una variedad de acciones y bonos, pero no tiene que elegir cuáles. El gestor del fondo lo hace por usted, mientras vigila el mercado y realiza los cambios necesarios. Esto ayuda a reducir el riesgo, porque si una inversión no va bien, otra puede ir mejor, lo que reduce la volatilidad de su cartera.
También le permiten diversificar su cartera, lo que significa que si una o dos inversiones no funcionan, hay algo más que las compensará. Y como los fondos de inversión están gestionados profesionalmente por expertos que tienen acceso a información sobre las tendencias del mercado, saben qué empresas son buenas inversiones en un momento dado, por lo que las seleccionan para sus clientes que no tienen tiempo de investigar por sí mismos (o ni siquiera saben dónde buscar).
¿Cómo elegir el mejor fondo?
Dar testimonio que se cuenta con el capital requerido
El hecho de buscar financiación debería indicar que tienes un plan en marcha, pero no siempre es fácil convencer a los inversores o a los bancos de que lo que quieres hacer funcionará. Ahí es donde entran las pruebas.
Si has ideado un plan y necesitas financiación para llevarlo a cabo, es importante que demuestres a tus posibles inversores lo bien pensada que está tu idea y lo mucho que has investigado sobre ella.
Si se trata de un nuevo producto o servicio, muéstrales el estudio de mercado que demuestra que lo que ofreces es necesario. Muéstrales las proyecciones financieras que demuestran lo rentable que será esta empresa con el tiempo.
Definir qué es lo que quieres lograr
Definir el objetivo que se persigue es un aspecto importante a la hora de contratar un fondo de inversión. El proceso puede resultar confuso, sobre todo para quienes son nuevos en él.
El primer paso es determinar qué quiere de su inversión. ¿Quiere obtener un beneficio rápido? ¿O quiere asegurarse de que su dinero crece con el tiempo? Una vez tenga esto claro, estudie los distintos tipos de fondos disponibles y determine cuál se ajusta mejor a sus necesidades.
A la hora de elegir un fondo, también debe considerar si desea invertir en acciones o en bonos. Las acciones son más volátiles, pero tienen mayor rentabilidad que los bonos, mientras que los bonos ofrecen seguridad, pero tienen menor rentabilidad que las acciones.
La liquidez
La liquidez es un aspecto importante a la hora de contratar un fondo de inversión. Es vital que se asegure de que su inversión es líquida, es decir, fácilmente accesible para usted.
La liquidez también se refiere a la facilidad con la que un activo puede convertirse en efectivo. Por ejemplo, las acciones son activos líquidos porque pueden venderse en bolsa y convertirse en efectivo casi de inmediato.
Lo contrario de la liquidez es la iliquidez: un activo que no puede convertirse fácilmente en efectivo ni venderse en el mercado. Si tiene una casa, es un activo ilíquido porque pueden pasar meses o años hasta que se venda por su valor total de mercado y puede que los ingresos ni siquiera cubran todos los costes asociados a la venta (como las comisiones de corretaje).
El horizonte de inversión
El horizonte de inversión es el periodo de tiempo durante el cual el inversor puede esperar recibir un rendimiento de su inversión. Suele expresarse en años, y viene determinado por el tiempo que el inversor cree que necesitará para recibir el rendimiento de su dinero.
La mayoría de los inversores eligen un horizonte de inversión a corto plazo, porque quieren recuperar su dinero lo antes posible. Si elige un horizonte a largo plazo, significa que mantendrá su dinero más tiempo del que la mayoría de la gente elegiría.
Las comisiones
Las comisiones son el importe que cobra la empresa de corretaje o la sociedad de fondos de inversión por ejecutar una operación. La mayoría de los inversores no pagan comisiones directamente, sino que estas se incluyen en el precio de sus participaciones en fondos de inversión o como parte de los gastos anuales totales de su cuenta de corretaje (también conocidos como ratio de gastos).
Si trabaja con un corredor de bolsa, este puede ayudarle a encontrar las mejores inversiones en función de sus necesidades y su tolerancia al riesgo. También le ayudarán a elegir entre fondos de inversión y fondos cotizados (ETF), que son similares, pero tienen distintas implicaciones fiscales. Si trabaja con un profesional de la inversión, se ocupará de todos estos detalles por usted, pero le cobrará una comisión más alta como compensación por su experiencia.
Muchos inversores no son conscientes de que las comisiones pueden suponer un gasto importante en un fondo de inversión, y algunos ni siquiera se dan cuenta de que están pagando comisiones. Pero antes de empezar a invertir, es importante saber cuántas comisiones pagará y cómo afectarán esas comisiones a su rentabilidad global.